El Tratado de Vinará se firmó en esa localidad santiagueña, el 5 de junio de 1821.
Es cronológicamente el cuarto de los pactos preexistentes que menciona la Constitución Nacional.
Por medio de este pacto se terminaba el conflicto por la autonomía que enfrentaba a las provincias de Santiago del Estero y Tucumán.
Santiago del Estero se declaró autónoma de la provincia de Tucumán el 27 de abril de 1820. Dicha situación no fue aceptada por el Gobernador de Tucumán Bernabé Aráoz que decidió doblegar el movimiento.
Santiago del Estero y Córdoba contribuían al sostenimiento del Ejército que se encontraba en Salta, al mando de Martín Miguel de Güemes, con tropas y enseres. Juan Felipe Ibarra le hace llegar una misiva a Güemes donde le informa de las dificultades que afrontaba ya que se encontraba repeliendo las incursiones de Tucumán.
Güemes decidió enviar tropas al mando de Alejandro Heredia en auxilio de los santiagueños.
Las tropas santiagueñas vencen en “los Palmares” a las tucumanas el 5 de febrero de 1821. El 3 de abril de 1821 vuelven a enfrentarse en “Rincón de Marlopa”, Tucumán; donde los santiagueños y salteños son duramente vencidos por las tropas de Aráoz.
Juan Felipe Ibarra decide replegarse hasta Vinará, localidad cercana a Tucumán con el objeto de defender la frontera.
Bustos y Güemes, quienes apoyaban a Ibarra, comenzaron a gestionar el fin de la guerra entre Santiago del Estero y Tucumán, teniendo en cuenta la necesidad de resguardar la frontera norte del ataque realista, y el bien superior de lograr la unión y un estado nacional. Debido a esa presión Aráoz acepta finalmente poner fin al conflicto.
El tratado fue suscripto por el Pbro. Pedro León Díaz Gallo por Santiago del Estero, Miguel Araoz por Tucumán y el Dr. José Antonio Pacheco de Melo por Córdoba.
Entre otros, el art. 10 establece la unión hermanable de Salta, Tucumán y Santiago y de sus respectivos gobiernos declarándolos aliados para operar contra el enemigo común y auxiliar a la provincia de Salta refiriéndose al Ejército que al mando del Gral. Martín Miguel de Güemes debía marchar hacia el Alto Perú en cumplimiento del plan Sanmartiniano, marcha que desde enero de ese año tenía interrumpida a raíz del enfrentamiento entre los gobernadores de Tucumán y Santiago del Estero
Dice Pacho O'Donnell “(…) Queda aún por reivindicar la decisiva importancia que tuvieron los soldados de dicha provincia [Santiago del Estero] en la heroica integración de nuestros primeros ejércitos a favor de su convicción patriótica y de su capacidad para sobrellevar las penurias de una guerra siempre en inferioridad de condiciones y en geografías que ponían a prueba las fortalezas física y psíquica”.
Compilación: Biblioteca Popular Jorge Washington Ábalos